LAS CHIMENEAS, RESTOS DEL PASADO CONSERVERO
Desde el siglo XIX y hasta la década de los años 90 del siglo XX, la industria conservera fue el motor de la economía molinense. Constituyó el eje industrial de la villa por sí misma como por las industrias auxiliares que aglutino a su alrededor.
A partir de los 90 los edificios fabriles se abandonan y prácticamente se destruyen. Este hecho se agrava por su situación en el centro urbano. Esta ubicación acelera la desaparición condicionada por los nuevos ordenamientos urbanos.
En cualquier caso quedan las viejas chimeneas, diseminadas por todo el casco urbano, como testigo de aquella actividad conservera y auxiliar.
CHIMENEA DE MAXIMINO MORENO
Se ubica en la plaza del Enclave de la Muralla entre la calle Ibn Arabí y la San Ignacio.
En 2011 fue restaurada con motivo de la construcción del Enclave de la Muralla donde se ubica el MUdEM (Museo del Enclave Muralla).
Conserva su estructura original con una culminación en la base poco decorada. Destaca la abertura de la base por donde se accedía para su limpieza interior.
El fuste esta bien conservado. En su remate, un anillo rodea la circunferencia del tronco. Es de color rojo. Además una corona engrosada decora la parte final.
Destaca también el hecho de la utilización del fuste para indicar el nombre de la fábrica. También cuenta con pararrayos que solía ser habitual en todas las chimeneas.
Hay que fecharla a principios del siglo pasado, aunque la chimenea que contemplamos debe ser de los años 60 ya que en estas fechas fue elevada por molestias producidas en la inmediata fábrica de la Molinera.
CHIMENEA DE HERNÁNDEZ PÉREZ O DE LA MOLINERA
Formó parte de la factoría de la Molinera. Ahora se encuentra en un espacio de zona verde de los edificios construidos al derribar la fábrica.
Es de las más decoradas del municipio tanto en su base como en su fuste y corona.
En el remate de la base, parcialmente enterrada, encontramos diversas franjas de adornos en ladrillo. La primera franja formada por ladrillos verticales, la segunda por ladrillos en punta a distintas profundidades.
Otra novedad es la espiral de ladrillo rojo que recorre de abajo a arriba el fuste.
El remate también cuenta con decoraciones diversas. Un primer tramo en el que desde una franja de ladrillos circular cuelgan líneas de ladrillo rematadas en estructura cuadrada que enmarca azulejos de color amarillo. Pasamos a un segundo tramo formado por arquillos apuntados. Todo se corona con un anillo de ladrillo engrosado.
Además también se utiliza el fuste para ubicar el nombre de la fábrica. Se remata por pararrayos.
Puede fecharse en la primera mitad del siglo XX en cuyos años finales se produce una recuperación del sector.
Los ejemplares conservados son 7. Cinco de los cuales pertenecen a factorías conserveras y 2 a otras industrias auxiliares.
Texto obtenido de la propia pagina de la Biblioteca en http://portal.molinadesegura.es/index.php?option=com_content&view=article&id=600&Itemid=180
View More »